jueves, 8 de abril de 2010

Román Camara Repair

El autor de este Blogg

El Edificio Chrysler

Hace 45 años, en un remoto pueblo de la provincia de Oriente en Bayamo Cuba, un muchacho de 14 años leía un artículo sobre el edificio Chrysler, que se publicaba en la revista selecciones en español, en el artículo se describía, como se había construido el edificio, en la avenida Lexington, entre las calles 42 y 43, era el más alto de los rascacielos construidos hasta el momento, 1928, una mole de granito, concreto, mármol, acero, y maderas preciosas, 78 pisos dedicados a oficinas de lo que entonces era la corporación Chrysler, su dueño llevo a su hijo hasta el último piso, y le dijo, contémplalo, este edificio será tuyo cuando lo conozcas bien, para conocerlo, tienes que barrerlo desde el último piso hasta el último subsuelo, entonces el edificio será tuyo, el leer aquel artículo, me fascino sobremanera, y aunque entonces no tenia los medios para viajar, me propuse que si algún día visitaba la ciudad de New York, visitaría también el edificio Chrysler, ese muchacho, era yo.

Con el correr del tiempo y los problemas políticos que se produjeron en mi país, solicite permiso para abandonar la isla, luego de 19 años de espera, pude salir de mi patria y emprender una nueva vida en Costa Rica, país maravilloso, donde estuvimos viviendo 3 años, el 18 de mayo de 1983, llegamos a los Estados Unidos el 23 de mayo por fin llegamos a la ciudad de New York, esta era nuestra meta, a los dos días ya yo estaba buscando trabajo como técnico de equipos fotográficos, campo en el cual me consideraba un profesional, comenzando a trabajar en el taller de reparaciones de cámaras llamado Japan Camera Repair donde laboramos por espacio de un mes, por problemas de comunicación y del idioma que se hablaba en este lugar que era predominantemente coreano, busque otro trabajo en la guía de teléfono, contestándome un señor en idioma español el cual me dijo que fuera de inmediato a su taller para hacerme una prueba, me dio la dirección de como llegar, y entre por un túnel directo a la estación de Grand Central, encontré el lugar sin problemas y comenzamos a trabajar de inmediato, a la una de la tarde me dijo que fuera a comer el lunch y que caminara por los alrededores para que conociera el lugar, al salir del edificio cual no sería mi sorpresa al ver que estaba en las mismas puertas del edificio que una vez me hizo soñar con esta ciudad, el edificio Chrysler, el CHRYSLER BUILDING.

Chrysler Camera para mi, fue como empezar de nuevo, aprendí a manejar maquinas de ajustar cámaras que nunca había visto, aprendí a reparar una cámara y dejarla como salida de la fábrica, ya que aplicando mis conocimientos a la nueva técnica mejoraba la calidad de mi trabajo, había comenzado una nueva etapa en la forma de trabajar que no se detendría en los próximos años pues nos habíamos propuestos avanzar junto a la nueva tecnología.

Cámaras como la Canon AE-1, Minolta X-700, Nikon F-2, Fuji 701, Ricoh XR, Yashicas FR, Olympus OM, Kodak, Pentax y muchas más, pasaron por nuestro puesto de trabajo, y dieron paso a otras de nueva tecnología, vimos como pasaba de una forma rápida la serie de cámaras de disco, también fuimos participes de su desaparición.


Entramos en la era de las cámaras de autofocus compactas, y vimos llenos de regocijo como aparecía la primera cámara SLR autofocus, la MAXXUN 7000, en lo adelante nuevas versiones llegarían al Mercado como la cámara APS, en peligro de extensión, y las nuevas cámaras digitales que prometen revolucionar la fotografía junto a las computadoras, lo que si no hemos visto desaparecer todavía, es la frase que dijera el creador de las cámaras Leicas hace mas de 85 años cuando produjo la primera cámara de 35 milímetros, HEMOS HECHO UNA CAMARA QUE PERDURARA POR LOS PROXIMOS 100 AÑOS, sus palabras, parece que se han cumplido, porque todavía queda película de 35 mm para 30 años mas.

Mi paso por Chrysler Camera dejo una huella muy bonita, todavía 18 años después encontramos vestigios de ese paso por aquel taller, el comienzo no fue fácil pues la tarea me la proponía yo mismo, yo era el que pintaba las paredes, el que limpiaba el compresor, el que barría el piso y botaba las basuras, el que hacia los deliberes a New Jersey, Long Island, Brooklyn, a todas las compañías de cámaras, era el que llevaba el carro a reparar, pues aparte del dueño Salomón Bissau, yo era el único que sabía manejar un carro de cambios mecánicos, convirtiéndome en un diestro chofer, en las calles de New York, después de cumplir con todas estas tareas, también tenía tiempo de reparar cámaras y asistir a los training correspondientes donde la relación con los ejecutivos de las compañías, fueron la base para ocupar el lugar que hoy ostentamos.

No solamente fui yo quien paso por Chrysler Camera, también mi hijo William, laboró a la par mía en aquel taller, también él empezó por abajo, limpiando y pintando los gabinetes que todavía hoy perduran en el taller de Chrysler Camera, fue allí donde el reparó sus primeras cámaras sin la supervisión mía, fue allí donde él se gano sus primeros dólares, con los que compró el primer televisor de la familia que todavía hoy perdura en su casa, para el también, mi reconocimiento en estas líneas.

Pasaron días, semanas, meses, y años, y mi presencia en el taller de Chrysler Camera, era notoria, nuevos técnicos llegaban, otros se marchaban para mejorar su futuro, también a mi me llego la hora de partir en busca de nuevos horizontes, una nueva oferta de salario, superior al que ganaría en el nuevo lugar no fue suficiente para que desistirá de mis propósitos, quería algo nuevo, con mayores posibilidades, de superación dentro del campo de la nueva tecnología, el edificio Chrysler y Chrysler Camera habían sido mi meta y mi nuevo punto de partida, había llegado el 2 de febrero de 1985, amigablemente me despedía de Salomón y de su esposa Chris, en mis futuras visitas mi presencia siempre era de júbilo y alegría.

Photo Tech (capítulo aparte) a grandes rasgos

Entramos a trabajar en Photo Tech el día 4 de febrero de 1985, mis conocimientos y mi experiencia eran de todos conocidos, nuevos training, mas trabajo y mayor perfeccionamiento de lo aprendido, Isaac Haaddic, (medio hermano de Salomón Bissau) quien unos días antes había renunciado en Chrysler Camera para ocupar el puesto de manager en Photo Tech y con el que trabaje en Chrysler por espacio de 2 años, sabía de mis condiciones de técnico y trabajador, me nombra su mano derecha y a la par laboramos durante los próximos 13 años, también William, mi hijo, labora en sus veranos escolares, adquiriendo nuevos conocimientos dentro del campo de las cámaras, paralelamente hace sus estudios de arquitectura en el Pratt Institute de Brooklyn donde se gradúa de arquitecto, puesto que desempeña actualmente.

Photo Tech sufre una serie de modificaciones dentro de su estructura interna y luego de de negociaciones es comprado por Frank Noraine quien lo administra hasta la fecha manteniendo por mi parte las asignaciones a subcontratos de Ricoh, Fuji y Nikon, adquiridas cuando Harry Frey era el dueño del negocio, estas asignaciones fueron mermando con el tiempo al desaparecer los modelos que se reparaban, en mi mente se empezaba a dibujar una nueva meta y un nuevo punto de partida, el día 15 de Julio de 1998, presento mi carta de renuncia la cual sería efectiva a partir del día 31 de Julio, el día 31 de Julio nos es ofrecida una calurosa despedida por parte de todos los que laboraban en Photo Tech, esta vez no tenía trabajo fijo que me esperara, esta vez tenía pensado emprender un nuevo negocio.

Roman Camera Repair (capítulo aparte) a grandes rasgos

El 2 de agosto de 1998, abre sus puertas, ROMAN CAMERA REPAIR, en un nuevo local en el 1021 de Paterson Plank Road en la ciudad de North Bergen, diseñado en una nueva forma arquitectónica, por mi hijo que ya era arquitecto, comenzamos a trabajar, o mejor dicho, continuamos con nuestro trabajo, pues Roman Camera Repair, fue fundada desde el día 27 de diciembre de 1987, y paralelamente trabajábamos en Photo Tech, los primeros 20 dólares ganados en aquel local están en un cuadro con una pequeña leyenda, en ese momento debíamos más de 20 mil dólares y entendimos que esos 20 dólares no se debían de gastar pues debíamos mas de mil veces esa cantidad, el negocio mejora y los primeros contratos de trabajo nos llegan de la compañía Fuji, donde necesitaban un nuevo contratista para un nuevo modelos de cámaras, en pocos días nos ofrecen también un nuevo contrato de cámaras profesionales, la seriedad, la rapidez, y la calidad de nuestro trabajo era de sobra conocida en esa compañía y poco a poco vamos adquiriendo nuevas obligaciones que cumplimos a cabalidad, nuestro taller se engrandece y nuestros negocios se complementan con el servicio de atención a técnicos en el extranjero, ya somos un taller reconocido en el ámbito internacional, clientes en toda sur América, Canadá, España, India, y Kenya en el continente africano además de el servicio de distribución de piezas de repuestos a nivel nacional en los Estados Unidos de la marca Ricoh nos hacen merecedores de muchos reconocimientos, Roman Camera Repair sale adelante.

Chrysler Camera, segunda parte

A principios del mes de mayo del año 2001, Frank Noraine, dueño de Photo Tech, donde yo labore por 14 años, me cita para que almorcemos juntos ese día, y me expone la idea de que juntos compremos el negocio de Chrysler Camera, le expongo que con mi negocio a mi me va bien, y que sería comenzar de nuevo otra vez pero que lo pensaría y le daría una respuesta en el curso de la semana, cuando llego a mi casa lo expongo a mi familia y a mi empleado de confianza Rodrigo Tobón, un silencio total parecía reinar en aquel momento, mi esposa no estaba de acuerdo, mi hijo no podía ayudarme, tenía su carrera y su empleo a media milla de distancia, sin embargo de quien menos lo esperaba surge la idea de hacerse cargo del negocio, Kenya, que contaba con un buen empleo, estaba decidida a trabajar de Nuevo conmigo, el sueño de un muchacho de 14 años volvía a renacer en mi y comenzaron los trámites para la compra del negocio, el cierre del negocio estaba programado para el día 13 de septiembre de 2001, a media cuadra de las torres gemelas, la explosión que conmovió al mundo, también toco nuestros corazones y nuestros negocios, la ciudad de New York se encontraba en un caos económico y por razones de seguridad el edificio Chrysler fue cerrado, afectando sobremanera el negocio de cámaras, no obstante la palabra de la compra estaba dada y el 7 de diciembre, al lado de las ruinas de lo que un día fue el centro de comercio mundial, se firmaron los documentos de compra del nuevo negocio Chrysler Cameras Repair Corporation.

El día 10 de diciembre nos presentamos en el Nuevo local, y nos familiarizamos con la forma de trabajar allí, nuestra primera tarea seria limpiar como lo hicimos 20 años atrás
nuevos sistemas de computadoras fueron instalados, y un registro completo de las cámaras y equipos fue puesto en funcionamiento, partes obsoletas que hacia 20 años no tenían movimiento fueron descartadas y dimos paso a nuevas formas de trabajar, poco a poco el espacio se fue ampliando a medida que pasaban los días, y una nueva imagen surgía en el local que 20 años atrás conocimos, habíamos cumplido nuestra meta, es posible que un nuevo punto de partida este por comenzar, SOLO MEDIANTE ESFUERZOS PERSEVERANTES, GUIADOS POR UNA ILUSION CLARA Y UNA AMBISION NOBLE, PUEDEN ALCANZARCE LAS CUMBRES O GRANDES REALIZACIONES DE LA VIDA.


Pastor Hipólito Román Borges
romanpastor@hotmail.com
hipolito-2002-05-19-01-25-00
=



No hay comentarios:

Publicar un comentario